miércoles, 25 de junio de 2014

¡SE VALE SOÑAR!


Ya pasó la euforia. Ya no tenemos la cabeza caliente. El guayabo del triunfo se ha disipado casi que completamente y es el momento de hacer el análisis del camino de Colombia en este mundial.

Debo confesar que me cuesta trabajo no ser optimista, que creo que esta selección Colombia está destinada a hacer algo grandioso en Brasil. Creo que lo mostrado hasta el día de hoy, no solamente en la chancha sino fuera de ella, da pie para pensar en una gran gesta del fútbol colombiano. No quiero escribir palabras tan optimistas porque me da miedo que se conviertan en un mal presagio y terminemos eliminados, jugando mal y totalmente decepcionados de lo que pudo ser. Pero que difícil es no soñar con la grandeza de estos 23 guerreros.

Primero lo primero, los números de la campaña colombiana. 3-0 a Grecia, 2-1 a Costa de Marfil y 4-1 a Japón, hicieron de esta la mejor participación de un seleccionado colombiano en el mundial de mayores. 9 puntos de 9 posibles. 9 goles a favor y 2 en contra. Además con James Rodríguez, Juan Guillermo Cuadrado, Cristian Zapata y Mario Yepes en el listado inicial de los mejores jugadores del mundial. No se puede pedir nada más de esta primera fase.

Ahora lo que viene: Uruguay. Y a pesar de que no hay un futuro más lejano que el equipo celeste, pensar en el partido que vendría en cuartos de final, que podría tildarse de optimismo desmedido, a mi modo de ver es realista. Creo que se le puede ganar a este Uruguay. Colombia está fácilmente entre los mejores 4 equipos de este torneo y debe ratificarlo en su partido contra los charrúas.

El equipo cafetero ha mostrado en la primera fase que no depende casi que de ningún jugador. James Rodríguez es el jugador diferente y desequilibrante que nos puede poner en un instancia más alta, pero igual sin él se puede ganar. Pékerman ha armado un equipo que juega de la misma manera en cualquier estadio; el grupo de jugadores se nota unido y ajeno a lo que podría desviarlos de los objetivos trazados y la poca o ninguna inferencia de factores externos (prensa, directivos, patrocinadores, hinchas), hace que se pueda creer en algo más grande.

Colombia ha armado un proyecto ganador, contundente y que emociona. ¿Se vale soñar? POR SUPUESTO QUE SÍ. ¿Mi pronóstico? Semifinales. ¡Se vale soñar!

No hay comentarios:

Publicar un comentario